LAS ORUGAS

Esta planta arvense, también muy común, y llamada por los de Casas de Haro oruga, es una planta con flores blancas, que suele salir en viñas, barbechos, campos de cultivo, bordes de camino, terrenos baldíos. Normalmente, suele aparecer en primavera, y su identificación es clara: flores blancas con cuatro pétalos y una línea negra que cruza el pétalo. Los italianos la comercializan, llamándola rúcula, muy apreciada en ensaladas. También se utiliza para cocinar los gazpachos viudos.

Esta planta suele encontrarse en el centro y este de la Península Ibérica, en todo el sur de Europa, también en todo el norte de África y en Asia. El nombre científico es Eruca vesicaria, y su nombre proviene de su sabor picante o ardiente (uro).

Se trata de una hierba anual de almo más de medio metro de altura que está cubierta casi en su totalidad por pelos. Las hojas están divididas con un lóbulo terminal grande y varios lóbulos laterales más pequeños, destacando especialmente los nervios por su color blanco (frente al verde ocuro del resto del limbo).

Las flores son blancas con venaciones violáceas u oscuras.Al estrujar la planta exhala un olor característico, nada agradable. Además, sus frutos acaban en un pico prominente.

Esta planta, de la familia de las crucíferas, es muy común en Casas de Haro. Se le llama oruga por su característica forma de oruga. Normalmente, suele crecer en familias desperdigadas por terrenos baldíos, cunetas de camino, viñas, campos en barbecho, etc...

En nuestra comunidad, se suele utilizar para preparar los "gazpachos viudos", variante del gazpacho manchego en el que se incluye carne de caza. Se utiliza las hojas de esta planta en vez de la carne. Es muy importante sofreír el vegetal antes de añadirlo a cualquier guiso, porque suele amargar. Suelen tener un sabor picante, de ahí el vocablo "uro" que significa "pico o quemo". Nos podemos hacer a la idea de las épocas de necesidad de nuestros abuelos y antepasados, especialmente en períodos de malas cosechas y guerras, en las que buscarían esta planta, apreciándola en su principal contexto, el de la escasez.

En la India se suele cultivar para extraer de esta planta el aceite de jambo, utilizado como combustible. En Italia se cultiva como verdura, y probablemente más de uno la habrá comprado, con el nombre de rúcula. Como todas las plantas crucíferas, puede ser nociva para la salud, puesto que sus semillas tienen sustancias que pueden producir bocio.

En wikipedia, aparecen más nombres con los que podemos denominar a esta planta crucífera:

Aballicos, alhuceña, aruga, arugua, berza alhuceña, eruca, eruga, hierba meona, jamargo, jamargo blanco, jamarguillo, jaramago, oruga, oruga blanca, oruga de barrancos, oruga pestosa, oruga roqueta, oruga vejigosa, pestosas, picograjo, rabaniza blanca, roqueta, ruca, rucas, ruqueta, tamarillas

También tenemos referencias interesantes, y medicinales, de esta planta.

Las plantas de esta familia no producen alcaloides, y si lo hacen es en cantidades mínimas, por lo que no merece la pena prestarles mucha atención. Lo más importante de la oruga es que elabora gran cantidad de glucósidos, algunos de ellos de gran actividad farmacológica y muy tóxicos, sobre todo si se emplean de forma casera, sin consentimiento de personal médico. De la composición de esta planta no se sabe mucho más, pues los datos con los que contamos son muy antiguos y por tanto poco fiables. Se sabe que contiene algunos ácidos como el tartárico, acético, tánico y antirrínico. Del resto de sus componentes no se puede decir mucho más. En cuanto a sus virtudes, desde siempre se la ha considerado un buen remedio como antiescorbútico, enfermedad producida por deficiencia de vitamina C o ácido ascórbico. La razón de utilizar esta hierba para resolver esta importante carencia radica en su sabor dulce más que en su composición, pues no se sabe que contenga cantidades importantes de esta vitamina. Otros usos que se le han dado es como estimulante y diurético, pero sin una gran actividad. En este mismo género existen algunas especies con propiedades más marcadas, así que la oruga en la actualidad se emplea muy poco.